El Reino Unido sancionó a tres militares venezolanos por violaciones a los derechos humanos
Por Maximiliano Peluso

El gobierno encarnado por el conservador Boris Johnson anunció este jueves sanciones contra tres jefes militares venezolanos por violaciones a los derechos humanos. El encargado de dar la información fue el secretario de Relaciones Exteriores, Dominic Raab, quién además hizo saber que se tomarían medidas contra ciudadanos de Rusia, Pakistán y Gambia.
Estas medidas, tomadas en el día internacional de los Derechos Humanos, forman parte de las facultades que tiene el país anglosajón para impedir que personas o instituciones vinculadas a violaciones graves contra los DD.HH. puedan ingresar u operar en ese país. Sobre todo, para que no pueda utilizarse el sistema financiero británico como canal para mover dinero internacionalmente o para financiar acciones terroristas en el mundo.
Estas medidas se suman al no reconocimiento de la victoria electoral del presidente Bolivariano, que en los últimos días viene recibiendo una serie de presiones internacionales en materia de apertura democrática, violación de DD.HH., e incluso con acusaciones de fraude electoral. Si bien es cierto que el partido de Maduro ganó las elecciones, estas se dieron en un contexto de participación de los más bajos de la historia democrática venezolana.
Parte de esto, se explica porque la oposición, liderada por Guaidó no “compró” la propuesta de Maduro, de elecciones parlamentarias libres, incluso asegurando que se iría si perdían, y recurrieron al no voto, y la posterior denuncia internacional del fraude como estrategia para desgastar la ya golpeada imagen del presidente de Venezuela.
Lo cierto, más allá de las especulaciones, es que el 80% de la población no concurrió a las urnas, lo que generó que los países centrales, sobre todo los europeos y EE.UU. desconocieran el resultado, e instalaran la teoría del fraude. Lo importante, o lo que hay que señalar, es que más allá de que las elecciones se hubieran desarrollado de forma transparente, la sociedad venezolana le envió un duro mensaje a su presidente.
Llegaron tan lejos, que incluso el propio Secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo tuiteo, antes de los comicios, que: “el fraude electoral en Venezuela ya está cometido. Los resultados que publique el ilegitimo régimen de Maduro no van a reflejar la verdadera voluntad de la gente”.
Así las cosas, la disputa entre Venezuela, Reino Unido, EE.UU. y las potencias europeas va en aumento, habrá que ver si Maduro tiene la cintura política para salir de este brete y acomodar un poco la política exterior porque, en definitiva, toda forma de bloqueo lo termina pagando el pueblo venezolano en su conjunto.