Mientras los ricos se vacunan en Miami, Alberto abre negociaciones para conseguir más vacunas.

Las vacunas de Moderna y la de Pfizer se sumarían a la Sputnik, si prosperan las negociaciones del presidente con estas empresas.

Por Trinidad López

No hay duda que uno de los temas del verano ha sido el de las vacunas contra el covid. Lejos quedaron esos estíos en dónde el tema principal era una canción pegadiza para que la juventud baile en lo boliches, y en cambio se paso a la salud como prioridad de la ciudadanía. En conjunto con esto, la oposición estuvo haciendo lobby en contra de la vacuna rusa por varios motivos, el primero de ellos, la supuesta falta de aprobación científica para ser utilizada, y por otro lado, la capacidad de producción de las dosis necesarias para la vacunación.

Pero en esto hay algo cierto, la producción de la vacuna viene lenta, pero no sólo la de Gamaleia, sino la de todas las farmacéuticas del mundo, que han visto sobrepasadas sus capacidades de producción en masa de las dosis que necesita el mundo para hacer frente a la pandemia. Por eso, el presidente empezó a tomar la iniciativa, y esta semana tendría reuniones con la multinacional Moderna para adquirir dosis de esas vacunas, las que se sumarían, a las que puedan negociarse con Pfizer y Sinopharm.

Y en esto el presidente es claro: “Yo quiero vacunas. Y me voy a sentar conversar con Moderna. Ya fue aprobada en Estados Unidos y tiene contratos con todo el mundo”, aseguró en una reunión en Olivos, dado que es necesario que empecemos a reactivar el país, y para eso tenemos que vacunar a la mayor cantidad de gente posible.

Los esfuerzos del gobierno argentino para asegurarse la mayor cantidad de dosis posibles, va a contrarreloj, ya que todo el mundo está tratando de adquirir vacunas, en un mercado donde los faltantes están a la orden del día, y las grandes empresas, que anunciaron con bombos y platillos la producción masiva, no están pudiendo cumplir con los contratos pautados.

Habrá que esperar ahora cual será el próximo movimiento de la oposición para criticar lo que se viene haciendo, porque de propuestas hasta el momento nada. Eso sí, recomiendan que el que pueda vaya a Miami a darse la de Moderna, pero claro, eso es sólo para los ricos, los demás, tendremos que esperar por un estado que está haciendo todo lo imposible para que el acceso a la salud no sea un tema de riqueza, sino de derechos.