Estas reuniones se dan tras el reclamo, caprichoso, de Mauricio Macri de que “abran las escuelas”. La repuesta de los gremios fue que comparten su deseo pero son concientes del peligro que eso representaría.
El Gobierno de la Ciudad de la Ciudad había fijado el 17 de febrero como fecha para el comienzo de las clases presenciales. A pesar de la oposición de los sindicatos, hasta el momento parece ser una decisión tomada. Lo grave es la falta de conciencia a la hora de seguir con este plan dónde CABA superó el pico de contagios de agosto.
Hoy tendrá lugar una reunión entre los dirigentes del sector y el Ministerio de Educación Porteño. El foco de la reunión será las condiciones del regreso a las aulas ya que se deben cuidar las condiciones sanitarias y las necesidades educativas de los alumnos.
Entre las posturas de CABA y los malos manejos de la Ministra Soledad Acuña, que citó a los representantes en mesas separadas, se comienza a generar un malestar que ponen en riesgo el anhelo, sin sentido por las condiciones sanitarias actuales, de Mauricio. Por su parte el Jefe de Gobierno Porteño, Horacio Rodríguez Larreta, dijo que el comienzo de clases es una prioridad para él y su equipo. Además declaró que “tenemos las escuelas preparadas”.
Por otro lado Mariana Scayola, Secretaria General del Sindicato Ademys, explicó que el año pasado rechazaron el comienzo de clases con la misma cantidad de contagios y que actualmente se necesitan mayor cantidad de personal para poder garantizar la educación. Además Mariana considero que sea imposible vacunar a todos los docentes antes de la fecha establecida, sumado a que aún no han comenzado las charlas por los salarios que el año pasado estuvieron 15 puntos debajo de la inflación.
Si bien las reuniones recién comienzan, la opinión del ex-presidente y la mala organización de la Ministro hacen que la tensión vaya en aumento y dificulten el acuerdo. Estos errores tendrán como damnificados a los estudiantes por culpa de algunos sectores caprichosos.