Educar desde la periferia de los barrios

30 estudiantes del programa “FinEs Proyectos Especiales” culminaron los estudios secundarios y celebraron ayer su graduación en el Polo De Educación Superior.

En presencia del concejal y referente político del Movimiento Evita, Marcelo Ibarra, el Inspector de la Modalidad Adultos de la Región 11 Profesor Osiris Rodriguez, la directora del CENS 452, Mónica Kaspierowicz, docentes, estudiantes de las comisiones  de Proyectos Especiales del programa Fines y las referentes Alicia Díaz, de Somos Barrios de Pie; Doris Márquez de la Corriente Clasista y Combativa, amigos y familiares de los estudiantes participaron de la celebración de la primera ceremonia de graduación, en el Polo de Educación Superior en Escobar, en la que 30 estudiantes recibieron su diploma que certifica la finalización de sus estudios secundarios.

Estos graduados no son sin dudas uno más, sino que pertenecen a la primera camada de estudiantes recibidos de las comisiones de FinEs comandadas por los “Cayetanos”, que en medio de la pandemia, salieron a caminar los barrios de Escobar, allí encontraron a cientos de escobarenses que necesitaban terminar sus estudios secundarios.

Tras un largo proceso de lucha y acompañamiento, esta política pública y estas organizaciones realizaron un arduo trabajo. Según lo que comentó Ibarra, en febrero se dieron cuenta de la necesidad, cuando en Garín hicieron la primera convocatoria y en menos de dos horas inscribieron a más de 80 estudiantes.

Por la pandemia, la gente no sabía dónde ir, preguntaban y les decían que enviaran un mail, algo poco probable, que los habitantes de los barrios pudieran hacer, pues no había conectividad, muchas veces el vecino no accede a la tecnología y en varios casos detectamos que si bien se enviaba un correo electrónico el mismo nunca era contestado, y nos dice: “esa es la diferencia, nosotros nos anticipamos, vamos al encuentro, llevando el Estado al barrio”.

Hoy, son más de 250 estudiantes inscritos al programa. Para los militantes de las tres organizaciones, que coordinan estas comisiones ha significado hacer un trabajo de campo, acompañar a los inscriptos, alentar a vecinos a que se sumen al programa y acoplar las necesidades del barrio al derecho a la educación.

Terminar los estudios no es una tarea que se pueda realizar con total facilidad, sino que hay muchos obstáculos en el camino, lo que ocasiona que muchas personas opten por no concluir su educación para priorizar otros aspectos de su vida diaria.

Los obstáculos que surgen para realizar el sistema educativo en tiempo y forma pueden tener varias aristas, pueden ser de diversas índoles como la cuestión económica o la posibilidad de tener que hacerse responsable de la familia, forman parte de algunos de los factores que influyen a la hora de hablar de terminalidad educativa. 

Rosa Martínez forma parte de la lista de personas que por determinada cuestión no han podido concluir sus estudios.

Rosa fue madre a una edad temprana, a los 15 años dio a luz a su primer hijo, esa responsabilidad ocasionó que la educación pasara a un segundo plano, pues ya tenía un compromiso más importante, debía priorizar la crianza de su pequeño bebe.

“Yo llegue a FinEs porque yo hace rato quería estudiar, pero entre una cosa u otra, los chicos, mi trabajo, siempre trabajé desde los 17 años que trabajo, cada vez que me decidía, algo pasaba y evitaba que comenzará, hasta que mi hermana vio en Facebook que el Movimiento Evita estaba anotando para continuar FinEs y me anote”, Contó Rosa acerca de cómo llegó al programa. 

A sus 42 años Rosa trabaja como ama de casa, también se inventó su propio trabajo, es pastelera, lo que le permite llevar un dinero extra a su familia, la cual la apoya en este nuevo desafío que se planteó, un desafío que pospuso en su corazón, clavando con un alfiler como pendiente una asignatura sin saber si alguna vez iría a finalizar.

 “FinEs para mi es todo” relato Rosa un poco emocionada por poner un punto final a una de las historias más largas de su vida, a la vez que incentiva a las demás personas que por algún, motivo al igual que ella, no han podido terminar sus estudios a que lo hagan.

“Estoy muy contenta con FinEs y cuando lo puedo recomendar lo recomiendo” señaló Rosa a la vez que agradeció la atención brindada por los coordinadores de las organizaciones sociales, quienes siempre estuvieron para que no abandone en medio del camino.

El FinEs abre puertas a sueños dormidos, a deseos que parecían lejanos, pero permiten la posibilidad de pensar más allá de lo que se hará a partir de culminar el programa.

Ese es el caso de Zulema que a sus 43 años el FinEs le permitió cambiar sus objetivos ya que antes nunca pensó en realizar una carrera y luego de estudiar se plantea la posibilidad de anotarse a una carrera universitaria.

A partir de la pandemia Zulema decidió retomar sus estudios ya que “el hecho de estar en pandemia, tener mucho tiempo de ocio y la necesidad de tener mi cabeza ocupada en algo ya que no podía, salir, no podía trabajar”, Describió Zulema sobre el motivo que la incentivó a volver a retomar los estudios. 

A igual que Rosa, Zulema tuvo que priorizar la crianza de sus hijos ya que fue madre a los 18 años lo que ocasionó que sus prioridades cambien y dejó su educación de lado.

Hoy gracias al FinEs su mentalidad cambió y se plantea nuevos desafíos que apenas dos años atrás no imaginaba. “Fines es hoy para mí, algo que me cambió para bien, me cambió la manera de pensar, cambió mis objetivos”, Cerró.

FinEs en Escobar

Las organizaciones sociales realizan el plan Fines en tres localidades, Maquinista Savio, Garín e Ingeniero Maswicthz, nos cuenta Alicia Diaz, quien agrega que en 2022, tienen un desafío: “garantizar a los escobarenses el acceso a la educación pública, primaria, secundaria y terciaria”; la dirigente de Somos Barrios de Pie, agrega: “Nosotros seguiremos acercando las políticas públicas a los barrios con la mirada que tenemos las organizaciones, si bien trabajamos a la par del municipio y la provincia, esto no significa que municipalizar o provincializar nuestro trabajo territorial”

En distintos puntos estratégicos ubicados en el Barrio Amancay, Benito Villanueva , Barrio Cabot, Barrio Los Pinos, Barrio Bedoya y Savio se desarrollan 13 comisiones del programa destinado para culminar los estudios secundarios.

Tras un largo proceso de lucha, se pudo implementar el plan FinEs comandado por las distintas organizaciones sociales, quienes desde el comienzo estuvieron a la par, con referentes educativos que se capacitaron y pudieron llevar el desarrollo de este programa, lo que les permitió entregar el diploma a los primeros egresados de sus comisiones, no cuenta Brenda Barretto, referente de la CCC

Son 254 alumnos que se anotaron este año en las comisiones comandadas por el Movimiento Evita, Somos Barrios de Pie y la Corriente Clasista y Combativa.

Este trabajo territorial no solo permite acercar la escuela al barrio y cumplir con el derecho a la educación, sino que también implanta nuevos objetivos y nuevos sueños a los alumnos que deciden anotarse.

El plan FinEs una política educativa que las organizaciones llevaran adelante

En el año 2008 a raíz del permanente problema de la baja tasa de egreso en los colegios secundarios se presentó un programa para dar respuesta a este conflicto.

En aquel momento se estimaba que más de 13.8 millones de jóvenes y adultos se encontraban con los estudios primarios o secundarios sin concluir, estos datos luego fueron confirmados a partir del censo poblacional realizado en el 2010.

El plan FinES nace como una necesidad para solventar un gran déficit del país, pero su razón de ser tiene que ver con atender a las obligaciones educativas generadas a partir de la Ley N° 26.206 (2006) que tenía como principales ejes la obligatoriedad del nivel secundario, las políticas de inclusión social y la reparación de la deuda social con las poblaciones con bajos niveles educativos.

Para poder cumplir con el objetivo trazado por el Plan FinEs no se podía pensar en el mismo modus operandi del sistema educativo regular, sino que se planteó llevar la escuela a los barrios y no que las personas vayan a la escuela.

Para ello, es necesario el esfuerzo y la colaboración de distintos actores sociales, en eso está el corazón del plan FinEs en ese proceso de inserción barrial, organizativa, territorial y dependiente de la acción local, las organizaciones saben que su rol es fundamental, por eso el buen diálogo con el inspector y la directora del Cens, con quien vienen programando mesas de encuentros con diferentes actores sociales, cuyo objetivo es la apertura de nuevas sedes, que permitan la inserción de más estudiantes de las periferias.

De esta manera la realización de esta política educativa no estaba en manos de los establecimientos educativos, sino que distintas sociedades civiles pueden establecer el FinEs en su espacio, ya sean estos movimientos sociales, sindicatos, parroquias u ONG, una política que se debe hacer desde la periferia al centro, para que llegue a la profundidad de los barrios.