Este mes comenzó a implementarse el Programa de Fluidez y Comprensión Lectora, diseñado específicamente para estudiantes de 4° grado de escuelas de gestión estatal y gestión privada de la Ciudad de Buenos Aires.
El programa busca fortalecer la fluidez y la comprensión lectora de acuerdo a la etapa escolar de cada chico o chica.
Con el programa Fluidez y Comprensión Lectora se realizan evaluaciones y actividades para quienes tengan dificultades.
En una primera instancia, el dispositivo se aplicará con más de 10.000 estudiantes de 250 escuelas de gestión estatal y privada que representan una muestra significativa de la Ciudad.
El programa cuenta con dos etapas. En primer lugar, una evaluación de la fluidez y comprensión lectora y, en segundo lugar, el trabajo sobre los resultados.
La evaluación también consta de dos instancias: un test de comprensión escrita estandarizado para todos los estudiantes y, en un segundo momento, la toma de lectura a aquellos chicos y chicas que deban reforzar la comprensión de textos.
Soledad Acuña, Ministra de Educación Porteña, destacó la importancia de esta evaluación: “Para diseñar las mejores medidas educativas, primero hay que saber desde dónde partimos.
La evaluación se tomará a lo largo de agosto y septiembre, y cada escuela definirá la fecha y la hora.
“Con este programa vamos a permitir a los estudiantes practicar, entrenar y fortalecer las habilidades necesarias para poder leer y entender lo que leen”, añadió Acuña.
Los resultados se clasificarán en tres niveles de fluidez:
- Alumnos que leen y comprenden textos
- Estudiantes que tienen dificultades para leer
- Estudiantes que aún no alcanzan el nivel básico de lectura
Los estudiantes que tengan dificultades tendrán 20 horas de formación con actividades típicas de lectura, mientras que quienes no sepan leer tendrán otras 20 horas extra con maestros especializados.
¿Qué es la fluidez y la compresión lectora?
La fluidez lectora es la habilidad de leer con rapidez, precisión y con la expresión apropiada. Los lectores fluidos comprenden lo que están leyendo.
La fluidez y comprensión lectora son aprendizajes que requieren práctica y sistematicidad.
En este sentido, la escuela es el lugar privilegiado para que el acto de leer se convierta en una gran ocasión para garantizar un espacio, un tiempo, textos, mediaciones, condiciones, desafíos y compañía que resultan necesarios para que cada niño se instale en su posición de lector.