La Unión Obrera de la Construcción de la Republica de Argentina (UOCRA) se declaró en estado de alerta en defensa de los 220 mil puestos de trabajo en obras que se ejecutan en la actualidad.
La comisión directiva central de la UOCRA manifestó, a través de un comunicado, su preocupación a causa de las declaraciones del presidente Javier Milei en materia políticas de obras públicas.
Desde el sindicato aseguran que la eliminación de la obra pública podrían en riesgo la continuidad laboral de 220.000 trabajadores.
Del mismo modo, advierte al sector empresario de nuestra industria, que el actual gobierno en ejercicio tiene garantizada la ejecución de las partidas presupuestarias correspondientes hasta diciembre de este año, lo que asegura la normal ejecución y continuidad de las obras en curso, razón por la cual no existen argumentos válidos que justifiquen la implementación de despidos, que en nada contribuyen a la paz social a la que todos responsablemente debemos contribuir.
La industria de la construcción es un sector clave para el desarrollo del país, dinamizador de actividad económica y multiplicador de empleo genuino, ya que genera más de 1 millón de puestos de trabajo directos e indirectos.
La obra pública es, en cualquier lugar del mundo, una inversión, no un gasto. Más aún en un país como la Argentina, que requiere de un planeamiento estratégico en materia de infraestructura que contribuya al desarrollo de nuestra economía y cuenta con un déficit habitacional de aproximadamente 4 millones de viviendas.
Desde la UOCRA insta al próximo gobierno a instaurar un diálogo con el propósito de alcanzar consensos que posibiliten que esto no sea “una hipótesis de conflicto”.