A menos de un mes de la vuelta a clases, el gobierno habilito a fijar cuotas mensuales irrestrictas a los establecimientos de gestión privada de todos los niveles.
Con esta iniciativa se derogó la norma que regía desde 2019 por la cual los colegios privados debían comunicar sus estructuras de costos a la Secretaría de Comercio y en función de un análisis de esta dependencia se permitían los aumentos.
“Que, entre los objetivos asignados a la citada Secretaría, se encuentra la implementación de políticas y marcos normativos necesarios para afianzar los derechos del consumidor, correspondiendo a su respecto la aplicación de la Ley N° 24.240 y sus modificatorias” decía la norma derogada.
Esta decisión es tomada a pocas semanas de que los establecimientos vuelvan a abrir sus puertas para dar comienzo al ciclo lectivo 2024.
De esta manera, los establecimientos educativos privados pueden fijar sus propios montos al igual que en la medicina prepaga que a partir de la quita de las restricciones acordaron subieron un 80 por ciento con ajustes mensuales.
El principal problema de esta medida es la falta de tiempo que tienen los padres para cambiar de establecimiento al alumno en caso de no poder llegar a las cuotas establecidas por el establecimiento.
