¿Qué significa la palabra holocausto? ¿Por qué el 27 de enero se conmemora el día internacional en memoria de las víctimas del Holocausto? Porque en esta fecha, en 1945, las tropas soviéticas liberaron el campo de concentración y exterminio de Auschwitz-Birkenau, el mayor de los creados por el régimen nazi.
Durante la Segunda Guerra Mundial, millones de personas -entre judíos, romaníes, homosexuales, comunistas, afrodescendientes- que no se ajustaban al ideal de Adolf Hitler fueron perseguidas y trasladadas a campos de exterminio. Algunas fueron asesinadas y otras tuvieron que trabajar sin descanso hasta la muerte.
Día Internacional en memoria de las víctimas del Holocausto
En noviembre de 2005, 60 años después de finalizada la 2° Guerra Mundial (1939-1945), la Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU) declara al 27 de enero de cada año como el Día Internacional en memoria de las víctimas del Holocausto.
En la resolución, la ONU condena todas las manifestaciones de intolerancia religiosa, incitación, acoso o violencia contra personas o comunidades basadas en el origen étnico o las creencias religiosas, como también insta a los Estados Miembros a que elaboren programas educativos que promuevan las enseñanzas del Holocausto con el fin de ayudar a prevenir actos de genocidio en el futuro.
(Exposición de caras metálicas que simbolizan el horror del Holocausto en el Museo Judío de Berlín, Alemania).
El Holocausto
Inicialmente la palabra Holocausto hacía mención a un sacrificio religioso en que se quemaba por completo a un animal. Luego de la 2° Guerra Mundial, el término resuena en la memoria colectiva de la humanidad asociada a uno de los episodios más crueles de la historia: el plan de exterminio de los judíos europeos ejecutado por los nazis.
El Holocausto es el mayor caso de genocidio de la historia y no fue producto de la brutalidad de la guerra, sino que fue un programa genocida, ideológicamente planificado y ejecutado por las autoridades alemanas.
(Mientras huía de los nazis, Charlotte Salomon de 26 años, pintaba cuadros. Fue asesinada en Auschwitz / Fuente: La Vanguardia).
Los campos de concentración: la construcción del horror
Si bien la Guerra había comenzado en 1933 y el hambre, el maltrato, los fusilamientos azotaban a hombres, mujeres, niños, ancianos, para 1940 la decisión del exterminio masivo y organizado de la población judía (principalmente) se convierte en un hecho.
La cúpula nazi ordenó la construcción, a escala industrial, de Auschwitz, Belzec, Sobibor, Lublin, Treblinka y Chelmno, seis campos de concentración con cámaras de gas ocultas como grandes duchas y sus hornos crematorios destinados a recluir a los recluir a los “enemigos de Alemania”.
En Polonia se construyó el campo de concentración más grande y sofisticado: Auschwithz-Birkenau. De los 6 millones de personas de religión judía que fueron asesinados por el régimen nazi, se estima que entre 1,5 y 2,5 millones pasaron por Auschwitz desde su apertura en mayo de 1940.
(Foto: Memorial del Holocausto, en Berlín).
La liberación de Auschwitz: 27 de enero de 1945
Con el final de la Segunda Guerra Mundial muy cerca, las tropas soviéticas llegaron a Auschwitz-Birkenau. Los soldados y los oficales alemanes habían huido imposibilitados de frenar el avance de los aliados. Al ingresar al campo de concentración, el ejército rojo se encontró con enormes fosas comunes llenas de cadáveres y más de 2000 prisioneros, que fueron liberados.
Recordar el Holocausto será siempre una advertencia de los peligros que el odio, el fanatismo, el racismo y los prejuicios provoca. Hacer memoria a conciencia es uno de los ejercicios más prudentes que como sociedades es indispensable realizar.
“Si el mundo llegara a convencerse de que Auschwitz nunca ha existido, sería mucho más fácil edificar un segundo Auschwitz. Y no hay garantías de que esta vez sólo devorase judíos”, palabras de Primo Levi, escritor italiano superviviente de Auschwitz.